Una buena alimentación es una de las grandes preocupaciones de la sociedad actual. Esto es un hecho que nos afecta a todos, independientemente de nuestra edad y condición.
Y una de las causas es que nos hemos vuelto blandos, vagos y poco creativos, por lo que caemos en el hábito de comer siempre lo mismo y casi únicamente LO QUE NOS GUSTA. Como cualquier hábito, se puede cambiar y educar.
Se puede conseguir, si haces caso a nuestras recomendaciones
Que un hábito se pueda cambiar, no quiere decir que sea una tarea fácil. En el caso de la alimentación, no es porque no sepamos qué es sano y qué no. Realmente, se debe a una gran cantidad de condicionantes como la falta de tiempo, el trabajo, obligaciones del hogar, problemas económicos o, simplemente, la falta de habilidades culinarias. Para poder enfrentarnos a esta serie de obstáculos, desde Pressumia os vamos a aconsejar qué podéis hacer para evitar la rutina y así educar el paladar:
1. Organiza tu alimentación semanal.
Para que sea lo más equilibrada posible. Combinando hidratos, proteínas… de acuerdo con tu edad y con tus circunstancias vitales. Puedes comenzar apuntando las comidas que te gustan, ten en cuenta las raciones que se pueden consumir, añade recomendaciones que convengan a tu dieta, etc. Y si cuentas para ello con la ayuda de un profesional de la nutrición, mejor que mejor.
2. Planifica la próxima compra.
Este punto es uno de los más importantes y por ello va seguido del anterior.
Cuando vamos al supermercado sin una lista de compra, generalmente nos acordamos de lo que más consumimos. Para evitar esto, si hemos planificado el menú semanal, podremos evitar la improvisación.3. Haz la compra sin hambre.
No menos importante es ir a hacer la compra a una hora en la que el hambre no esté presente. Si lo piensas bien, esto último no te va a extrañar. Cuando hacemos la compra con hambre, tendemos a elegir lo que nos apetece en ese momento, que no suele coincidir con comida saludable y balanceada.
4. Aprende a cocinar o mejora tus habilidades culinarias.
En muchas ocasiones, por lo que nos da “pereza” cocinar es porque lleva su tiempo. Tiempo tanto para cocinar como para aprender.
En los tiempos en los que nos encontramos, quedarse en casa ha cambiado de significado. El que se queda en casa, ya no es un vago, sino que es una persona responsable. Y os preguntaréis, “¿qué puedo hacer con la cantidad de tiempo que tengo ahora y no aprovecho?”. Es la ocasión perfecta para aprender a cocinar si no sabes todavía. O incorporar nuevas recetas para variar tu menú y aumentar tu repertorio como cocinero.5. Pásate a los aperitivos saludables.
Como decíamos antes, cuando tenemos hambre solemos sucumbir ante alimentos poco saludables. Por esto mismo, y siguiendo los dos puntos anteriores, debemos anticiparnos y comprar los ingredientes, para prepararnos un almuerzo saludable o, sencillamente, piezas de fruta, que es una forma fácil de saciarnos.
Frutas como los plátanos y las manzanas son las más comunes, porque se pueden llevar y consumir en cualquier sitio. Por otro lado, este snack se puede volver un poco monótono. Es por este motivo, por lo que nuestros zumos no son mezclas corrientes. En Pressumia, nuestros zumos son resultado de la mezcla de frutas y verduras NUNCA VISTAS. De esta forma, no caeremos en la monotonía y son ideales para cualquier hora del día, además de tener la sensación de estar como recién exprimidos.
Por último, no te obsesiones. Ten en cuenta que no existen alimentos mágicos, y que el estilo de vida que lleves y la dieta que adoptes son pilares que realmente va a marcar nuestra salud.
En resumidas cuentas, ciertas dietas no son una fórmula mágica que le sirva a todo el mundo y tenemos que buscar la que mejor se adapte a nuestro estilo de vida.
Si lo que te hemos recomendado te convence, ponte manos a la obra. Y si decides incorporar nuestros zumos a tu dieta, además de no extrañarnos, estaremos encantados de que formen parte de ella.
¡Saludos y vitaminas!